miércoles, 26 de junio de 2013

Ludovico E.

Cierro mis ojos y veo todas esas siluetas de luces y colores, veo música, también veo silencio, y a mi misma como una temerosa noche que inquieta espera verse convertida en luz, como una luciérnaga perdida en un mundo estrepitoso gobernado por un tiempo falso, luchando por descubrir quién es mi alma, y con sueños guajiros de ser un árbol junto a miles de árboles más, besándome apasionadamente con la idea de que solo seré un pequeñísimo destello de consciencia que rellenará la eternidad del universo mi amor.

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